Enero 08, 2007

[El plácer del levantarse de la cama a las 11 de la mañana]

No hay placer más grande que no tener que madrugar.
Poner el despertador a las 9 de la mañana, porque tienes que hacer cosas, y cuando llega la hora y suena, apagadlo sin problemas, sin la angustia y la culpabilidad de: "llegaré tarde al trabajo".

Mi despertador estaba programado para las 10 de la mañana, pero lo he apagado desde el momento que ha sonado, y me he vuelto a arropar hasta arriba. Que calentito se siente en la cama a esas horas, que sensación de felicidad poder tirar de la manta hacía arriba para seguir durmiendo.
Los sueños que se tienen desde que apagas el despertador y vuelves a dormir, son eróticos. Está comprobado: a mucha gente le pasa: a mi me pasa siempre.
No es por eso por lo que sigo durmiendo más, que conste.

En el momento que el sonido del despertador me despertaba de un sueño lindo y agradable, lo he apagado, y he empezado a soñar maldades: sin querer.

Muchas mujeres me perseguían, todas con una misión: follarme. ¡A mi!.
Y yo me miraba ¿que tengo yo, porque me persiguen a mi?.
No entendía nada. Aquellas mujeres eran mayores que yo. Tenían un cierto atractivo, pero las ganas de follar que escupían por la boca, me daban asco. Me aterrorizaba tener a una mujer de ese tipo pidiéndome más y más sexo.
Yo en el sueño estaba a falta de amor: caricias, miradas cómplices: tiernas: necesitaba cariño, no sexo. No una mujer, ni un montón de mujeres deseosas de mi, de mi cuerpo, de mi sexo. No.

Intento huir de ellas. Me meto por unas habitaciones extrañas, todas llenas de camas. Salgo y entro de las habitaciones, había tantas: era como un hostal. Había escaleras. Las mujeres me perseguían. Eran muchas. Una de ellas me atrapó:
Me hizo tumbar en la cama, encima suya. Yo estaba confusa. En el sueño me dejé llevar por ella. Quería llorar, gritar, pero por arte de magia ahora yo era una SuperHeroe Folladora.
Ahora llevaba una capa roja, un antifaz de color rojo, y por única ropa: un tanga negro, sujetador negro, y una liga (de esas que no me gustan nada).
La mujer gritaba de placer y yo todavía no le había tocado un pelo.
La mujer busca algo con sus manos en mis bajos, hasta que me sorprendo yo misma por lo que encuentra: un enorme consolador con forma de pene.
Entonces me indica que la cabalgue o algo así. Me pongo encima de ella, y como no quería sexo con ella, y soy una SuperHeroe Folladora, hago como que la penetro, pero en realidad no lo hago.
Ella me coge mi mano, la lleva hacía sus pechos. Hace que yo se los toque.
Los pechos de esta mujer no son nada bonitos. No me gustan. Mas bien me desagradan.
Pero como SuperHeroe que soy, se los toco, de la mejor forma que sé.
Cuando esa mujer termina y se siente satisfecha, la puerta se abre y entra otra.
Esta es una mujer, pero entre sus piernas tiene un gran pene, y este, es de verdad.
Me quedo alucinada, la miro como un niño que mira el escaparate de una tienda de juguetes: sorprendida. La miro con los ojos muy abiertos.
Esta mujer no quiere que la folle, quiere follarme ella a mi. Siento miedo.
Yo no quiero. Yo no quiero follar. No, por favor. No.

Yo sólo quiero amor y ternura.
La chica se aproxima a mi. Se sienta en la cama. Me coge mi mano, y ........

Camadesecha.jpg


Suena el despertador. Doy un bote de la cama. No. No quiero dormir más.
Eso me pasa por ser tan curiosa y ver tantos vídeos porno.
Que da lugar a soñar con estas cosas.


Me pregunto que pasaría si apagas el despertador por segunda vez, y sigues durmiendo.

Aunque de igual te lo dijo eigual a las 01:02 PM
A otros no les dio igual ..

jajajaja debe haber mejores sueños eroticos que este, cuando te conectes te cuento uno que soñe hoy, raro pero mmmm (··,)
Un besote

Escrito por: ale, el Lunes, 08 de Enero de 2007 a las 10 PM
¿Te da igual?









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