Febrero 06, 2007

Ya has llegado

Has entrado por la puerta.
Yo te espero sentada,donde siempre, con una copa de Martini con Naranja, en la mano.
Te aproximas hacía donde yo estoy sentada, te pones de cuclillas, frente a mi, me miras a los ojos:
Te he echado de menos - me dices-.
Suelto la copa, y te cojo las manos. Las dos. Acaricio ambas con mis dedos gordos de cada mano. Así, suavemente, como intentando sacarles brillo.
Y yo a ti -acierto a decir-.

Mirarte a los ojos es como perderte en el cielo con las nubes blancas.
Es tan dulce como comer algodón de azúcar.
Mirarte a los ojos es amarte en silencio.
Apoyas tu cabeza en mi regazo. Pareces una niña pequeña que busca calor y cobijo. Yo soy tu protectora. Ahora, aquí, en casa, sin más ruido que el de nuestras respiraciones nadie te puede hacer daño. Nadie.
Te acaricio el pelo. Y veo que una sonrisa reaparece en tu rostro.
Me gusta tu comisura, creo que nunca te lo he dicho. Tienes la comisura más bonita del mundo. Me quedaría ahí, dándole besitos hasta mañana.
Si, sigue....-te escucho decir-.
Sé que te gusta. Te gusta que te acaricie, que te mime. Que te quite el estrés a base de caricias suaves. Sin buscar sexo. Sin nada. Solo caricias suaves.
Sin querer te mojo un poco el pelo. Tu no te has dado cuenta -suspiro aliviada-.
No quiero que me veas llorar. Me preguntarías que porque lloro. Y yo tendría que responderte : porque no quiero perderte: porque no quiero que te vayas nunca de mi lado. Porque no sé de que color son las mañanas si despierto sin ti.
Demasiado tarde, te has dado cuenta, y ha ocurrido lo que yo me imaginaba: me has preguntado.Y te he contestado.
Te alejas de mi tan veloz como un rayo.
¿Tu eres tonta? -dices exaltada, a la vez que sorprendida-.
No contesto. Ahora solo te miro. Veo amor en tu cara.
.....
Por nada de este mundo dejaría yo a alguien como tu. Tan grande y tan preciosa -dices, mientras me miras a los ojos, como queriendo que nuestros labios se junten en un dulce beso-.
¿Eso quiere decir que nunca te separarás de mi? - pregunto-.
Me contestas con una sonrisa. Con la cabeza de medio lado. Como intentando hacerme creer que soy una niña pequeña que está preguntando que si el cielo dejará de existir alguna vez.
Tu gesto me contesta. No hacen falta más palabras.

Me levanto rápidamente. Quiero prepararte la cena. Que descanses. Estás cansada. Has trabajado 14 horas seguidas: tienes que descansar. Que tumbarte, que estirar las piernas.
Por lo demás tranquila -te digo-.
Me miras sonriendo.
Estira las piernas y descansa, de lo demás me ocupo yo -te vuelvo a decir, mientras cruzo la puerta que me lleva a la cocina-.

unamano.jpg


NOTA: [Todo esto está en mi cabeza: no ha sucedido realmente: que pena por ambas cosas].


Aunque de igual te lo dijo eigual a las 09:48 PM
A otros no les dio igual ..

...Cuando una persona realmente desea algo el universo entero conspira para cumplirselo...

Escrito por: ale, el Miércoles, 07 de Febrero de 2007 a las 12 AM

Un blog... único, especial. Ha sido un placer leerte.

Un beso...

Escrito por: Laura, el Miércoles, 07 de Febrero de 2007 a las 06 PM

¡Qué suerte por tenerlo en la cabeza!

Besos y más**

Escrito por: Mireia, el Jueves, 08 de Febrero de 2007 a las 09 PM
¿Te da igual?









Recordamos los datos?