El peso en las alas... el canto en la piedra... los años y los siglos se amontonan en el vacio nebuloso de los dias... los ojos llenos de recuerdos... el pecho lleno de silencio...
Siguiendo las huellas de un angel que pasa, endormecido por las pulsaciones de su propio corazon, un angel descansa.
Su almohada de piedra, huele a cielo.
Que hermoso me encantara usarlo en esta foto en mi exposicion si no te molesta es jhermos muhcas gracia amigo Zar.
Escrito por Nina a las Julio 27, 2004 08:11 AMCon mucho gusto.
Este pequeño texto es mio tanto como tuyo ya que tu foto me lo inspiro... tomando mi café, a la orilla del rio, por la mañana.
Gracias amigo, realmente me encanto un abrazo.
Escrito por Nina a las Julio 28, 2004 02:33 PM