Julio 04, 2006

Canción de amor

Respira hondo. Y tenía muchas más. Un largo viaje en barco que merecía la pena. El clic que pone fin a la oscuridad del pasillo despierta en ella el temor a ser descubierta. Contiene la exhalación para que puedan seguirla muchas más. No puede ser. No hay trenes. Mañana al mar. Esto no puede acabar así. Cayendo sobre él como la fiera. Estaba distraído, sopesando el empate a cero en televisión. Lo había decidido de repente. Necesitaban atraer su atención. Como aquella tarde en la que no paró de hablar, describiendo con sumo detalle, todo aquello de cuanto sabía, que no era tanto. La echaba de menos. Ya he escrito mi canción. Hecho con barro de las orillas del río, lo paseó por los viejos imperios. Coloca el esférico en el suelo. Le echaba de menos. Aquello le recordaba demasiado a un videojuego de los de antes. Ahí se reunían. Oí que un día el amor, como un niño asustado, entró en su habitación y se metió con ellos en la cama. Fue bajo el sol. Se acordó de aquello que decía siempre que nevaba. Da un paso adelante. Para besarle, pensó, para besarle. Tan solo habían pasado unos días. Casi se pierden, entre tanta gente. La ceniza al caer levantó una pequeña nube negra en el centro de la habitación. Ensimismado, parecía pensar en algo importante, aquello no era una cara de fútbol. Volvería por sorpresa. Nunca lo supo nadie, hasta que se marchó. Mientras, él, sin saberlo, anticipa todas esas sensaciones. Y corría por un jardín de hormigón, esquivando las balas. Y allí lo encuentra. Se quedaron con él.

Posted by germanmj at Julio 4, 2006 08:36 PM
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