Marzo 12, 2004

El día después

Hoy acompañé a H. al aeropuerto. Volví solo. Había una atmósfera extraña. Quizás era yo. De pronto quise llorar. Allí sentado en el vagón de metro, con los codos apoyados en las rodillas y apoyando la barbilla en los puños. El día después, después de haber estado impasible, viene por rachas una sensación extraña de desolación. Hay historias concretas que me conmueven. Como si sólo al ponerle nombre a las víctimas, al vincularlas a conocidos, al concretar las circunstancias personales o conocer relatos de primera mano, sólo entonces fuera consciente de las dimensiones de todo esto.

He visto fotos de periódico que me han dado asco. ¿Quién ha tomado la decisión tan vil de publicar esas fotos sin respetar a las familias de las víctimas? Qué asco, que asco... He oído estupideces provenientes de los mismos políticos que me aburrían hacía una semana. He visto cortinillas en TV con banda sonora de película de acción. No pasan sino unas pocas horas, y ya tenemos toneladas de basura.

Escrito por Lobo a las Marzo 12, 2004 05:34 PM