Noviembre 16, 2004

El vuelo del pájaro

Intento reconstruir mi vida. Es curioso. Dice Carmela que todo lo que se dice en determinados momentos tiene importancia. Un momento como este en el que me pongo a pensar sobre mi, lo es. Y digo que es curioso porque hablo de reconstruir, no de construir. Tengo 29 años y necesito reconstruirme. Necesito saber quién soy más que nunca, necesito saber qué es lo que realmente quiero y necesito perderle el miedo a la vida.
La veintena ha sido una etapa increíble. No la más feliz, que esa siempre fue la infancia, pero sí una de las que recordaré toda mi vida. Aún así, y a pesar de haber reído un montón, a pesar de haber hecho un sinfin de cosas, he sabido que no era feliz. Siempre me faltó el amor. Correspondido, claro. Siempre me falté yo mismo. Vivir para hacer feliz y ayudar a los demás,a mi entorno, me ha traído muchas cosas buenas, una enorme gratificación personal, pero ahora me necesito más que nunca. Ahora es mi hora. Y da miedo tener la certeza que el momento ha llegado y que no hay vuelta atrás. Tener valor o no tener miedo a vivir, a ser feliz, es el reto más grande e importante de mi vida. Y sé que estoy en el buen camino. Lo noto, lo percibo, lo siento. Sólo pido poder encontrar toda la fuerza que me ayude a volver a quererme, respetarme y a ser feliz conmigo mismo. Sé que con esto, todo lo demás llegará por sí solo.

Escrito por Robert1975 a las 01:59 AM | Comentarios (0) | TrackBack