Texto: Newton
Escalarmente nadie puede saber cual es la carga ideal para la sumatoria de los escupitajos, solitarios e infiltrados por un hipotético libro de amargos cálculos.
Fue un tiempo duro y lleno de lujos, olvidando por igual su trabajo y su idiota espacio en blanco.
Rayas y nombres de una respuesta que no llega,
cinta negra de lentes cromáticos
sin simetría ni algoritmos
Un ojo de varias toneladas, ligero en la programación, onda limpia de una gran explosión…