Marzo 22, 2005

A mis niños...

"lo he conseguido". Creo que esta frase una de las más hermosas que se pueden pronunciar. Lograr un sueño, una meta, una esperanza... es algo absolutamente reconfortante.
Esta vez yo no he "conseguido", he "ganado". Siento como si hubiese ganado a todos y cada uno de vosotros; como si formaseis parte inseparable de mí; cómo si me hubieras robado algo que ahora es sólo vuestro y ha cambio me hubierais regalado vuestras sonrisas, vuestros abrazos, vuestros emociones, vuestras esperanzas, vuestros cariño... eso es más de lo que esperaba recibir, pero una vez más me habeis sorprendido y me habeis tocado. Me habeis tocado de tal modo que nunca olvidaré estos cuatro días pasados en vuestra presencia.
Ahora mismo me embriaga una sensación incontrolable y que parece estallarme por dentro. Y es ahora cuando mi corazón os quiere recordar que os quiero. De verdad.
Espero teneros siempre a mí lado. Esperó estar yo siempre al vuestro regalandoos cada segundo de mi vida porque es entonces cuando esos segundos se vuelven únicos e irrepetibles.
Un abrazo chavales, me alegro de que os hayais subido a mi tren y hayais llenado mi vagón de ilusión, esperanza y amor.

EL CORAZÓN MAS HERMOSO
Un día, un hombre joven se situó en el centro de su poblado y proclamó, que él poseía el corazón más hermoso de toda la comarca.
Una gran multitud se congregó a su alrededor y todos admiraron y confirmaron que su corazón era perfecto, pues no se observaban en él ni magulladuras ni rasguños. Si coincidieron todos, sin duda era el más hermoso que jamás habían visto.
Al verse admirado, el joven se sintió más orgulloso aún y con mayor fervor aseguró poseer el corazón más hermoso de todo el vasto lugar. De pronto un anciano se acercó y dijo:
"¿Por qué dices eso, si tu corazón no es ni aproximadamente tan hermoso como el mío?"
Sorprendidos, la multitud y el joven miraron el corazón del viejo y vieron que, si bien, latía vigorasamente, éste estaba cubierto de cicatrices y hasta había zonas donde faltaban trozos y éstos habían sido reemplazados por otros que no encastraban perfectamente en el lugar, pues se veían bordes y aristas irregulares en su alrrededor.
Es más, había lugares con huecos donde faltaban trozos profundos. La mirada de la gente se sobrecogió. Cómo puede él decir que su corazón es el más hermoso?, pensaron.
El joven contempló el corazón del anciano y al ver su estado desgarbado, se echó a reír: "Debes estar bromeando" dijo. "Compara tu corazón con el mío... El mío es perfecto. En cambio el tuyo es un conjunto de cicatrices y dolor".
"Es cierto", dijo el anciano, "tu corazón luce perfecto, pero yo jamás me involucraría contigo... Mira, cada cicatriz representa una persona a a la cual entregué todo mi amor. Arranqué trozos de mi corazón para entregárselos a cada uno de aquellos que he amado. Mucho a su vez, me han obsequiado un trozo del suyo, que he colocado en el lugar que quedó abierto. como las piezas no eran iguales, quedaron los bordes por los cuales me alegro, porque al poseerlos me recuerdan el amor que hemos compartido."
"Hubo oportunidades en las cuales entregué un trozo de mi corazón a alguien, pero esa persona no me ogreció un poco del suyo a cambio. De ahí quedaron los huecos -- dar amor es arriesgar, pero a pesar del dolor que esas heridas me producen al haber quedado abiertas, me recuerdan que los sigo amando y alimentan mi esperanza, que algún día tal vez regresen y llenen el vacío que han dejado en mi corazón".
"¿Comprendes ahora lo que es verdaderamente hermoso?".
El joven permaneció en silencio, lágrimas corrían por sus mejillas. Se acercó al anciano, arrancó un trozo de su hermoso y joven corazón y se lo ofreció.
El anciano lo recibió y lo colocó en su corazón, luego a su vez arrancó un trozo del suyo ya viejo y maltrecho y con él tapó la herida abierta del joven. La pieza se amoldó, pero no a la perfección. Al no haber sido idénticos los trozos, se notaban los bordes.
El joven miró su corazón que ya no era perfect, pero lucía mucho más hermoso que antes, porque el amor del anciano fluía en su interior.

Escrito por Nachinator a las Marzo 22, 2005 05:04 PM
Comentarios

Hola Nachete, qué tal? La verdad es que me he metido en tu página por casualidad, porque estaba un poco aburrida. Nunca lo había hecho hasta ahora.Casualmente había un escrito dirigido a nosotros y, quiero decirte, que me ha encantado. Bueno, antes de nada, quiero decirte que el día de la penitencia te esribí una carta, aunque al final no te la di, quiero que ahora la leas. Es ésta:

Hola Nachete!
En primer lugar quiero darte las gracias por todo, por ser mi catequista y por compartir conmigo parte de tu tiempo. Me alegro un montón de que me haya tocado en tu grupo. Hasta ahora, este momento, el de la confesión, a sido el más importante y el más emocionante. Como ya sabes, yo soy bastante alocada, y no suelo reflexionar, ni pensar las cosas, pero me he dado cuenta de que es algo importante, y que tengo que prender a hacerlo. he "abierto los ojos", y me he dado cuenta de muchas cosas. Ésto merece la pena(aunque las 9h. de autobús, pufff) Espero ser capaz de llevar a la práctica todo lo que he aprendido, me cueste lo que me cueste.
Gracias Nacho por ser como eres, por ser tú!Me ha encantado conocerte y espero que esta amistad sea para siempre. Gracias por todo lo que has hecho, por mí y por el grupo. te quiero y jamás te olvidaré, GRACIAS POR TODO.
Lucía


Y ésta era la carta que escribí en el momento de la penitencia. Fue un momento inolvidable, muy profundo, quizás el mejor de toda la pascuita.
Como te dije, estuve a punto de no ir a la pascuita, porque se supone que estaba castigada, y ahora que lo pienso, menos mal que me dejaron ir, porque me hubiera perdido una experiencia inolvidabe y muy gratificante y, sobretodo estando tú en mi grupo. Mil gracias por todo Nacho, por estar a mi lado, por estar a nuestro lado, por no olvidarte de nosotros. También quiero que sepás que tú tienes un trozo de mi corazón, que yo sin ti no soy yo y que perderte no es ningún juego. Nunca bajarás de mi tren. Te lo prometo.

Escrito por Lucía a las Marzo 22, 2005 06:27 PM

Hola¡¡¡¡¡
Q tal¿?Has descansado muxo?¿?jiji.

Estos cuatro días que hemos vivido has sido muy especiales para mí, y no solo porque he tenido tiempo para pensar, para reflexionar sobre muxas cosas, sino tambien porque me conocido mejor a mi misma y a los demás.
He conseguido el objetivo que me había propuesto, y estoy muy contenta de haberlo conseguido, porque lo necesitaba. Realmente este era la parte del trayecto de mi vida que necesitaba para ser feliz, para darme cuenta de que tengo que vivir el día a día, y llenar los años de vida, y no la vida de años.
La vida no es más que un viaje en tren-((¡¡¡te acuerdas¡¡¡))y, nada impide que se suban otras personas que serán muy especiales para nosotros; quiero que sepas que si me pidieran volver a un momento del pasado sería el instante en el que tu decidiste ser nuestro catequista, mi catequista. Me has enseñado mucho, y con tu ayuda he abierto los ojos, he visto nuevas caras de mi que no conocia,jijiji...
También decirte que eres una persona muy especial para mí, que nunca te voy a olvidar(que espero que tú tampoco lo hagas) y que TE QUIERO MAZO,jeje...

Nunca olvidaré esta experiencia.

ANA

PD.-En esos cuatro días hubo un momento muy especial para mí: "Ana, no llores, porque si lloras, me muero".Esa frase la tengo grabada de por vida en el trozito de mi corazón que ocupas tú, y que cada día se va haciendo más grande; ocupando todo el hueco del trozito que tienes tú de mí.Muxos besukis.-

¡¡GRACIAS POR TODO!!

Escrito por Ana a las Marzo 22, 2005 09:11 PM

GRACIAS $ PERDÓN. Creo que con estás dos palabras sería capaz de decirte todo lo que para mí supones. En primer lugar, perdón, porque cuando llegaste al grupo te lo pusimos difícil, muy difícil; pero, como todos los esfuerzos, ha tenido un premio. Ahora,formas parte de todos nosotros yaunque somos jóvenes, nuestro corazón no esta intacto y sin cicatrices, la vida nos ha hecho ir dando trocitos de nuetro corazón a las personas más insospechadas... Contigo me pasó lo mismo, empezaste siendo "simplemente" nuestro catequista, y ahora... Ahora eres un amigo,uno más ( también ha ayudado a que parezcas uno más tu carota de niño).
En segundo lugar, gracias, por todo. Por haber confiado en nosotros y aunque fuera difícil,haber logrado formar parte de nosotros. Gracias por estar ahi cuando te necesitamos, por entregarnos tu tiempo, por demostrarnos que podemos lograr lo que nos propongamos.
Estás en mi tren, mejor dicho, en mi vagón. Aquí tendrás siempre una amiguita... Jeeje.
Un día ke me sienta más inspirada te escribo algo más oks¿?¿?
Mientras tanto esto es todo.
Un besazo

Escrito por Irene a las Abril 13, 2005 06:57 PM
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