banner1.gif
Las cosas son como son,
no como nos gustarían que fuesen

Enero 27, 2007

Divagaciones

El lunes a primera hora de la mañana cuando me dirigía a mi trabajo había decidido ser una persona irresponsable. Me dije, esta semana Les vamos a ser irresponsables; consideraba que no sería una tarea muy complicada de cumplir y que sólo era cuestión de proponérmelo. El objetivo era que no siendo responsable no tendría tanto trabajo, y no estaría tan tensa.

Pero la vida tiene esta cosas, que el mismo lunes no se le ocurre mejor idea al Director de RRHH de mi empresa de revisar mi retribución con la intención de proponerme nuevas cosas. Mal empezamos mi propósito ¿Por qué? Porque la que suscribe esta en el fin de un proceso de selección a falta sólo – palabras textuales de la última persona que me entrevisto que resulta que era el director de la unidad a la que me incorporaría – de hacerme la oferta económica. Entiendo que a ciertos niveles de interlocución ya no estamos para mentir [nota: me hagan la oferta económica que me hagan voy aceptar ya que estoy interesada en cambiar de aires; nota2: nunca me ofrecerán menos de mi retribución actual].

Así que allí estaba yo hablando con el RRHH sobre otros asuntos relacionados con la empresa cuando me cuenta que hay que revisar mi retribución y los nuevos proyectos que tenían para mi. Al principio le dije que no quería hablar de temas económicos que no era el momento [flipo; hasta lo vi rojo increíble ver al de RRHH rojo hasta me sorprendió que estuviese descolocado]. Al final no me quedo más remedio que contarle mis circunstancias [que estaba en un proceso de selección y que yo creo que entre 1 o 2 semanas me llamarían ] y que no me parecía propio hacer ningún tipo de negociación ya que mi intención era irme [ pero ¿no habías dicho que querías ser irresponsable?, si, pero ¿qué iba hacer?]. Ya lo sé, puede que a lo mejor no me llamen de la otra empresa, que se le crucen los cables o vete tu a saber que puede pasar, pero no fui capaz de ponerme a negociar mi retribución y futuro en la empresa. No me parecía responsable.

Y todo esto se traduce a que ahora tengo una presión –estúpida, tonta – porque me había tomado este proceso de selección de manera muy tranquila, he ido pasando las siguientes fases, tranquilamente me decía si me llaman bien y sino pues también; pero ahora es como si tuviese una presión, no sé como explicarlo.

No pasa nada, en la empresa en la que estoy no se han enfadado, han valorado mi honradez. Vamos a esperar unas semanas, según ellos [después a la reunión se incorporó el Director General] seguro que me van a llamar y sino pensamos en otras posibilidades y me voy hacer otras cosas ya que si lo que hago no estoy a gusto antes de que me corte las venas o me vaya prefieren que lleguemos a un acuerdo.

Realmente estoy cansadísima de mi trabajo en la actualidad porque me obliga a interactuar mucho con muchas personas todo el día. Y a mi me cuesta mucho, muuuuchiiiisimo ser sociable tantas horas. ¿Por qué? No sé, a mi me cuesta delegar [yo soy como Juan Palomo yo me lo guiso y me lo como] soy muy exigente, me cabrea que las cosas se hagan mal o que sea necesario repetir las instrucciones/tareas mil veces. Entonces tengo que delegar tareas, me obliga a explicarlas a detallarlas muy bien [casi tardo menos en hacerlas yo sola, no me gusta tener que dar tantos detalles] y si no se hacen bien me cabreo y como no es plan que mi cabreo se vea, me lo como; y trato de ser comprensiva, empática y corrijo con el mejor humor.

Todo esto tiene un desgaste personal [posiblemente incompresible para muchas personas] que no merece la pena.

Esta es la situación (tanto centro de atención en la empresa), sumado al frió que hace – otra cosa que quizá nadie pueda entender pero a mi el frió me mata, se me mete en los huesos y no me sale [vale que estoy para que me encierren y tiren la llave, ya los sabemos. Pero de momento mi familia no lo ha considerado necesario, que conste lo han hablado entre ellos ] y mi necesidad de tener una vida ordenada - a veces me trato como una persona enferma, que necesita estabilidad – me tiene un poco tensa ¿?

Además no sé, me imagino que todo suma, esta semana se me ha dado por pensar que soy inmadura, que por ejemplo: con mis años y dedicarme a escribir en un blog, que debería tener una vida más acorde con mi edad o por lo menos más definida. Por ejemplo: Dentro de 10 años cómo me gustaría que fuese mi vida, y no tengo respuesta [en las entrevistas de trabajo miento] no lo sé [pero aunque reduzca la escala de tiempo a 5, 3 o 1 año, la respuesta es la misma ] mientras tenga salud, lo demás me da un poco igual.

Tengo que renovar mi fondo de armario, pero me da pereza; cada vez soporto menos salir a comprar, encuentro un millón de motivos para posponer el salir de compras. Empieza a ser preocupante, a este paso ya debería ir mentalizandome para comprar cosas para el verano porque el invierno esta pasando y no hay trazas.

Bueno y nada más….dejo de dar la plasta.