Destrucción masiva

Esto es todo amigos

No tengo pensado escribir aquí en breve. No se trata de falta de ideas, se trata de falta de ganas de plasmarlas. Es, en definitiva, una de esas etapas de "¿para qué hago todo esto?" que a menudo me dan. Quizás abra otro blog para escribir otras cosas, quizás me haga budista, o quizás vuelva a escribir en este blog dentro de un tiempo. Se aceptan apuestas.

PD: La foto es repetida, pero me apetece volver a ponerla. Estaba en la primera cabecera del blog.
PD2: Sé que es una despedida muy sosa, pero cuando uno ha perdido las ganas por algo no sabe ni darle un buen final.

Yo estuve allí

Ayer la tienda de Discos Castelló del Maremagnum de Barcelona abría sus puertas a medianoche para vender en primicia el nuevo disco de Madonna. Yo estuve allí. Sí, increíble.

Pero contaré la historia desde el principio. Estando por la mañana en casa tumbado en el sofá vi en el canal UrbeTV o como sea (el antiguo FlaixTV) que a las doce en el Maremagnum se podría comprar el disco de Madonna. A mí, claro, me la traía floja, pero me acordé de S. a quien recientemente le había bajado y grabado el single y que es un incondicional de Madonna desde el Ray of light. Cuando llegué al trabajo se lo conté y se moría de ganas. Además alguien nos contó que también regalaban un póster por la compra del disco. Como S. no tenía a nadie que le acompañara así que me ofrecí voluntario. Podía ser divertido, y a mí me hubiera gustado tener a alguien que me acompañara si hubiera sido la venta en primicia de un grupo que me gustara.

Así que al salir del trabajo nos fuimos al Maremagnum en su coche. Llegamos algo antes de las once y ya había una cola de siete personas frente a Discos Castelló. Fuimos a cenar y al volver, justo a las doce, había una cola de unas sesenta personas. Comenzó a sonar a todo volumen el single “Hang up” y poco a poco la gente fue entrando en la tienda. ¡Y tan poco a poco! Estuvimos en la cola esperando a entrar hasta la una menos cuarto. Había varias cámaras de televisión filmando el evento (espero que nadie me haya visto), y la chica que fue la primera en comprarse el disco hizo el paripé ante ellas como una Miss recién coronada (sólo le faltaron las lagrimitas). Al fin llegó nuestro turno y S. compró su ansiado disco y le regalaron un póster. Yo no me lo compré. Podéis llamarme “rancio”, pero no podréis llamarme traidor.

Y bueno, la cosa se queda aquí. No es más que una anécdota como otra cualquiera. Estuve allí, lo vi, y no pasó nada, pero me hizo gracia. Nos hicimos una foto con la Polaroid de recuerdo, pero me da mucho palo colgarla.

Ahora, como complemento a este post tan soso, un fragmento de la conversación que he tenido con pauli mientras lo escribía:

Pauli:
lo estas escribiendo ahora??
W. Holden:
sobre lo que hice anoche: ir a comprar el disco de Madonna en primicia a las 12 de la noche
W. Holden:
bueno, yo no me lo compré, acompañe a un amigo
Pauli:
me lo dices en serio o en broma??
Pauli:
ostras
Pauli:
y tu amigo es marica??
Pauli:
por supuesto que es marica!
W. Holden:
la duda ofende
Pauli:
jajajaja
Pauli:
es que me extraña que a algun tio hetero le de por ir a comprarse el disco a las 12 de la noche
W. Holden:
no creo que hubiera ningún tio hetero
Pauli:
seguro que habia mas de un colega mio
Pauli:
sabes? creo que voy a incluir este trozo de conversación en el post
Pauli:
cual??
Pauli:
el que acabamos de tener?
W. Holden:
sí
W. Holden:
quieres añadir algo más? algo para quedar guay?
Pauli:
jajajajaja
Pauli:
times go by.......so slowly
Pauli:
que es el estribillo del single de la fabulosa Madonna
W. Holden:
lo sé, aunque es "time goes by"...
Pauli:
es verdad
Pauli:
como me jode que un chaval de 22 tacos me corrija
W. Holden:
vas a quedar como una pringada, lo sabes?
Pauli:
esto tambien lo puedes poner
W. Holden:
lo voy a poner todo
Pauli:
Bueno, pues me piro que empieza gran hermano

PD: Supongo que gracias a Google recibiré la visita de alguna que otra alma perdida que buscaba algo sobre la divina Madonna. A todos estos vivistantes ocasionales quisiera decirles una cosa: ¡VIVA LED ZEPPELIN!

No, no juega a baloncesto, hijodeputa

Toda persona alta lleva consigo una cruz que no es otra que haber de aguantar que la gente, a menudo desconocidos, generalmente gente mayor, le pregunte si juega a baloncesto.

Desde probablemente los catorce años (por entonces medía más de metro ochenta) he de aguantar que la gente me toque los huevos con temas de conversación que giran en torno a mi “generosa” estatura. No es sólo que las bromitas no tengan gracia, es que siempre son las mismas y uno siempre tiene que fingir que es la primera vez que lo ha oído. Es un poco como hablar del tiempo con un desconocido con quien coincides en un ascensor.

La última anécdota sucedió el domingo por la tarde mientras volvía a casa en bus. Un hombre viejuno que estaba en frente mío se me quedó mirando y me dijo:

Viejuno: *************
Holden: ¿Disculpe? – llevaba el mp3 a todo volumen.
Viejuno: Que usted es jugador de balonsesto, ¿no? – tenía acento venezolano o mejicano, aunque su aspecto era europeo.
Holden: Pues no – yo pensaba que era otro que me confundía con Gasol.
Viejuno: Pues porque no quiere, porque con lo alto que es…
Holden: Ya…
Viejuno: ¿Cuánto mide?
Holden: 1’94.
Viejuno: ¡Caray! – Yo pensando: ¡Rayos y retruécanos! – ¿Y su novia también es tan alta?
Holden: No, soy un pervertido y me gustan bajitas – vale, esto no se lo dije así.
Viejuno: ¿Y qué hase para besarle? ¿Se sube a una banqueta?
Holden: Da saltitos, como los canguros. – tampoco se lo dije, pero es que mi respuesta del momento fue muy sosa.
Viejuno: Bueno…¿y qué tal el tiempo por ahí arriba?

Jo, jo. Me parto.

¡ES UN CHISTE COMPLETAMENTE NUEVO!

Ya para acabar, me gustaría responder a las preguntas que me hacen con más frecuencia (también llamado FAQ) para ver si así se sacia la curiosidad del personal y me dejan un poco en paz:

Pregunta estúpida para romper el hielo: Que alto que eres, ¿no?
Respuesta tajante para ver si me dejan en paz: Sí.
Pregunta muy personal: ¿Cuánto mides?
Respuesta inapetente (tras responder a esto un millón de veces): 1’94 o así, no lo sé exactamente. Sencillamente me la pela.
Pregunta original donde las haya: ¿Juegas a baloncesto?
Respuesta con algo de mosqueo encima: No. Juego al TETO.
Pregunta al estilo “soy lo más gracioso que ha parido madre”: ¿Qué tiempo hace por ahí arriba?
Respuesta estilo “oh, eres la monda”: El mismo que ahí abajo, gilipollas.
Pregunta estúpida aleatoria: ¿Te cuesta encontrar zapatos?
Respuesta absurda: Sí, los dejo debajo de la cama y luego no encuentro el par completo.
Pregunta estúpida estilo “mis neuronas están de vacaciones”: Desde ahí arriba lo debes ver todo muy bien, ¿no?
Respuesta estilo “no me busques las cosquillas”: Efectivamente, veo lo capullo que eres desde una posición envidiable.
Pregunta surrealista: ¿Tu madre te regaba por la noche?
Respuesta hiere-sentimientos: No, pero seguramente a ti tu padre te metía mano por la noche.
Pregunta absurda: ¿Cuál es la raíz cuadrada de 689’39?
Respuesta coherente: Que te den.
Pregunta estúpida sin más: ¿Ya encuentras camas a tu medida?
Respuesta sarcástica: No, duermo en una pista de aterrizaje del aeropuerto.
Pregunta estúpida estilo “tengo mucho tiempo libre”: Siendo tus padres tan bajitos, ¿como has podido ser tú tan alto?
Respuesta molona: Mi madre siempre lo niega, pero yo sé que mi padre biológico es Gary Cooper.

¿Y por qué no le preguntaran a todos los bajitos si son jockeys?

ADVERTENCIA

Black Rebel Motorcycle Club

Conocí a los Black Rebel Motorcycle Club con la canción Whatever Happended To My Rock ‘N’ Roll y me compré su primer disco, de nombre homónimo. Me pareció demasiado lento, oscuro, con un sonido cargante, y aburrido en líneas generales. Lo sigo pensando, si bien hay un par de canciones salvables. De su segundo disco nunca he escuchado más que Stop, que me parece una canción muy buena, o más bien cojonuda, pero sobre lo que es el disco, Take Them On, On Your Own, no puedo hablar.

Creo que me compré Howl, su último disco tras leer la crítica que le hacían en la Rolling Stone. No porque lo encumbraran, sino porque lo que detallaban me atraía: un disco casi acústico, lleno de Folk, Blues, Gospel y Country. Algo muy atrevido para un grupo en la órbita de los nuevos rockeros como los Strokes o los White Stripes, ¿no?

Así que bueno, me compré el disco y de buenas a primeras no me impactó, porque yo tenía altas esperanzas, como siempre. Nunca me compro un disco del que no espero grandes cosas (Puedes leer un poco más sobre las primeras audiciones de un disco en el blog de The Thief). El disco ha estado aparcado desde septiembre en mi estantería y no ha sido hasta hace unas semanas cuando realmente lo he descubierto.

¿Qué decir del disco? Podría copiar alguna parrafada sacada de una web y quedarme tan ancho, pero no es mi estilo. Bien, Howl es una pasada de disco. Es algo que suena auténtico, a un grupo que cambia sin traicionarse, que madura mirando hacia atrás. Es un disco tranquilo, pero no lento. Comienza con Shuffle Your Feet, un tema que a mí me recuerda a los Stones más blueseros y que tiene un ritmo muy pegadizo y tarareable. Le sigue el tema que da nombre al disco, una balada oscura más que atrapa gracias al teclado y los coros del final. Ain’t No Easy Way está llena de rabia sureña. Con Complicated Situation no puedo dejar de cantar el estribillo deseando poder acompañarme de la guitarra acústica que se pudre en mi cuarto. Y The Line….. una maravilla indescriptible que pone y punto final. Es un disco que no sonará en Razzmataz, y que no hará que les inviten al FIB, pero es tan jodidamente auténtico y da una patada tan grande a las tendencias que siguen todos los grupos de rock indies de los últimos años que merece estar en un museo, o al menos en vuestra discografía.

Todo esto sólo tiene un objetivo, que alguien se escuche el disco y, con un poco de suerte, le guste. Dadle tiempo, como yo he hecho. Los discos no tienen por qué seducirte a la primera, y nunca es tarde para darle una segunda o tercera oportunidad.