Últimamente la frase de moda es: nuevo talante de diálogo. A mi, esta frase me recuerda a todas esas frasecillas que estamos hartos de leer en los librillos de gestión: los novelados, los pseudo-científicos-filosóficos o los que tienen grandes dibujos (llamados de "aeropuerto" porque se leen mientras esperas el avión; pero, cuestan como todos); en los libros estos mensajes funcionan fenomenal; cuando llegas a tu wonderful company, e intentas emular al protagonista del libro de turno, pues nada, las cosas no funcionan; mala suerte.

Me da miedo que nos pasemos cuatro años dialogando y nos quedemos sin movimiento, sin ejecutar, sin avanzar.

Talante si, pero no podemos dejar de remar.

Así que, ya vale de escribir tantos propósitos (wishlist) y a trabajar.

De sobra sabemos que el papel lo aguanta todo y las palabras se las lleva el viento.

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