Trabajo de noche. De 11 de la noche a 7 de la mañana. Y eso me gusta. Me gusta ir en contra del mundo. Cuando ellos duermen yo trabajo y cuando ellos trabajan yo duermo.
Vivo sin atascos, sin ruidos, sin oficinas llenas de gente. Y eso me gusta.
Trabajo solo. Y eso me gusta. No se me hacen tan largas las jornadas laborales.
Como un mundo paralelo. Y mientras L y E sueñan yo escribo.

Hoy, aunque no lo parezca, estoy triste.
He chateado un rato en el messenger con L y se ha apoderado de mí la tristeza.
A mi me encantaria...
Giani Febrero 12, 2006 05:44 AMYo también trabajé exactamente con ese mismo horario y también estaba solo, y no lo pasé muy bien, no...
Lo mejor es trabajar de tardes, de 3 a 11 por ejemplo. Así puedes salir de fiesta todas las noches!!
Tiene un gran encanto eso que cuentas.
Normalmente esas tristezas repentinas como la que cuentas acaban convirtiéndose en sugestivos sueños (si los recuerdas) y reflexiones espontáneas.
Y no es triste eso? Me refiero que siempre vayas al contrario de la gente. No te cruzas con nadie, vives al reves... No se... Yo no podria. Besotes (gracias por el enlace. Hago lo mismo)
Lore Abril 21, 2004 12:57 AM