Febrero 26, 2004

Elecciones

Nadie puede negar la importancia que tiene para Latinoamérica quién es el Presidente de USA, y por supuesto, para el resto del mundo. Casi es tan importante como el presidente local, sobre todo por la sintonización de las derechas vernáculas con el Departamento de Estado. Si hubiera estado Reagan en lugar de Carter en los años de plomo, o Bush en lugar de Kennedy en la crisis de los misiles en Cuba, muchas cosas serían distintas.
En noviembre de este año habrá una elección que puede marcar el futuro del planeta por muchas décadas, en el caso de que quede alguien para contarlo. E incluso el período hasta noviembre puede ser peligroso para la humanidad, según que el resultado de las encuestas preelectorales sea o no favorable a Mr. Bush. Si las cosas le van mal en las encuestas, no sería improbable una fuga hacia adelante. Los americanos pueden ser renuentes a cambiar de presidente en medio de una guerra (“no hay que cambiar de caballo en medio del río”, diría un general nuestro). Todo el poderío del complejo militar-industrial (como lo bautizó el marxista Dwight Einsenhower), está detrás de él y no es cuestión de que caigan los beneficios. Hay que tener en cuenta que llegó al cargo que ocupa mediante elecciones truchadas, con la complicidad de su hermano el Gob. de Florida y de la Corte Suprema con mayoría conservadora. Michael Moore, el director de “Bowling for Columbine” cuenta muy bien en un libro como se hizo.
Si las cosas le van bien, esto tiene implicancias muy profundas para el resto del mundo. Significa que la experiencia de Vietnam y ahora la admisión de equivocación sobre los pretextos de la agresión a Irak no han sido debidamente digeridos por los ciudadanos de USA y van persistir en cosas semejantes. También significa que la manipulación mediática de la opinión pública ha sido un éxito completo. Alguien ha dicho que Hollywood es tan importante para USA como la bomba de hidrógeno. Sigamos con lo mismo, que la gente se lo traga.
La victoria de J.F.Kerry marcaría indudablemente un avance del pensamiento norteamericano. En su juventud, K estuvo contra la intervención en Vietnam y lo pescaron en una foto detrás de Jane Fonda, en una manifestación antiguerra. Lo que no significa mucho, por supuesto. Pecados de juventud los cometimos todos. Eso no impidió que se enrolara y lo condecoraran por valor en combate, pero si rompía la cédula y desertaba, ahora no podría ser candidato. En principio, está contra la ocupación en Irak (aunque votó a favor de la intervención), piensa tomar en serio el tema del calentamiento global (y la parte que le compete a la industria de USA en eso) y está considerado un candidato de centro izquierda preocupante por el big-business. Sería interesante que Kerry eligiera un buen vice. Algunos K han elegido mal a sus vice. A uno de ellos le fue muy mal por ello, hace cuarenta años.

Escrito por Bonsoir a las 12:19 AM | Comentarios (1) | TrackBack

Febrero 05, 2004

Bocón

La pérdida de valor del dólar frente al euro en enero tentó a Franck Moulet, francés, 27 años, estudiante de Bellas Artes y a su amiga, de regreso de unas vacaciones en el Caribe, a pasar por Nueva York. Tomaron un avión de American, en Santo Domingo. Durante el vuelo, Franck fue al baño y la azafata, considerando que permanecía más de lo necesario, le golpeó la puerta. Al salir, molesto por la intervención y mientras se sentaba, habría dicho, según la azafata "Mierda!. La bomba que puse en los baños no funcionó!". Según Frank, lo que dijo fué "My shit don´t explose!" , y nunca mencionó la palabra bomba. La verdad, Franck, es más o menos lo mismo.
Fue instantáneamente botoneado y al descender en New York fue detenido, inculpado de "falsa alerta de bomba" y alojado en un buque prisión amarrado frente al Bronx. La amiga fue interrogada y puesta en un avión de vuelta a Francia.
Franck estuvo dos días en el buque y luego fue conducido a la prisión de Rykers Island, una isla prisión frente a Manhatan, de extrema seguridad para delicuentes con condenas mínimas de cuatro años, donde estuvo dos semanas. La pasó muy feo ese tiempo allí, pero al parecer los únicos que no lo jodieron demasiado e incluso le dieron una mano fueron los afro. Según Le Monde, abogado francés mediante, Franck tuvo que declararse culpable de "comportamiento anormal" , y pagar 600 de multa para poder volver a su país. Si insistía en su inocencia, arriesgaba cuatro años de prisión si era declarado culpable. El miedo se ha instalado en la sociedad americana. Parecen entender que la tecnología esta vez no los ayuda mucho.
En el caso de Frank Moulet, además de miedo, parece haber bronca. La negativa de Alemania y Francia a acompañar a los tres chiflados en la aventura irakiana despertó intensa furia en USA, particularmente en contra de Francia, que tiene poder de veto en el Consejo de Seguridad. Boicot de quesos, vinos y perfumes, entre otras cosas. "Liberty Fries" en lugar de "French Fries", y así. Y ahora, con el reconocimiento de que las armas de destrucción masiva no existieron nunca (cosa que todo el mundo sabía), más bronca. Lástima que los franceses protestaron porque no les tiraron algunos contratos para la "reconstrucción" de Irak. Quedaron como los buitres, queriendo disputar al león parte de su presa. Y así se lo dijeron a Chirac: "participarán en la reconstrucción los países que arriesgaron la vida y la sangre de sus soldados".

Escrito por Bonsoir a las 10:57 PM | Comentarios (0) | TrackBack