HANOVER (New Hampshire)
- Los expertos de arte estan alarmados: un nuevo software americano promete volverse mas hábil de ellos en desenmascarar los cuadros falsos y las atribuciones erroneas.
Algunos investigadores del Darmouth College, en el New hampshire, han desarrollado un algoritmo para la autenticación de las obras de arte, en particular pinturas, grabados y dibujos. El software usa imágenes digitalizadas de las obras que quiere examinar y analiza automáticamente las pinceladas y otras características del dibujo, para acertar si corresponden al estilo del artista. "En las obras de arte es posible encontrar las características únicas de un pintor", explica Hany Farid, uno de los autores del programa. "Es el mismo sistema con que se asocia un escritor al empleo preferente de particulares palabras y cadencias".
El algoritmo ha sido experimentado sobre la célebre "Madonna con bambino" del Perugino. El software americano ha confirmado lo que ya se sabía, es decir che el artista umbro fué ayudado en la realización de la obra por sus alumnos.
Se ha podido igualmente determinar que de trece cuadros atribuidos al flamenco Pieter Bruegel el Viejo, cinco son obra de imitadores.
Ahora los investigadores dicen estar listos para resolver los numerosos misterios de la historia del arte, pero los expertos recomiendan prudencia: "Es algo bastante insólito, somos todos bastante escépticos", ha dicho Nadine Orenstein, conservadora de la colección de dibujos y grabados del Metropolitan Museum de Nueva York, en la revista tecnológica Wired. Pero el profesor Farid, parece seguro de lo que dice: "hay propiedades de la pincelada de un artista que no son visibles al ojo humano", declara, "Nosotros podemos encontrarlas con nuestros análisis.
El método elaborado por Farid y sus colaboradores consiste en digitalizar la pintura a examinar, dividirla en secciones y pasarla por una serie de nueve filtros, convirtiéndola en un modelo matemático. Los investigadores admiten que, en este proceso, alguna información valiosa puede perderse. Pero Farid precisa que la finalidad del software es "capturar las propiedades matemáticas de un artista, invisibles al ojo humano".
Un punto de vista que no condivide Laurence Kanter, conservador del metropolitan Museum de Nueva York: "También un hombre puede calcular con la mente. No hay necesidad de una máquina. Lo que cuenta es la interpretación de las pruebas".