Saneamiento de perforaciones y desgarros en la tela

Antes de proceder al reentelado de un lienzo es necesario sanar todas las perforaciones que afligen la superficie del cuadro.Esto se llevará a cabo después de un minucioso trabajo de ajuste de las zonas periféricas a los desperfectos, mediante el desplazamiento manual de la tela y ayudados por pequeños pesos colocados en los puntos con tendencia a rebelarse o mediante la aplicación mínima de humedad que vuelva dúctil la tela y nos permita la manipulación de la misma hasta su correcto posicionamiento.
Haremos uso de comunes alfileres que nos servirán para fijar los extremos de la fractura en modo de poder situar correctamente los refuerzos de sujeción que se aplicarán por detras del lienzo haciendo uso de grapas de tejido untas en paraloid y por delante de la superficie pictórica en forma de grapas de papel de seda pegadas con aguacola.

a) Las grapas de paraloid fabricadas artesanalmente con el procedimiento explicado en el recuadro que flanquea este texto se aplican pegando las grapas sobre el reverso de la tela siempre en el mismo sentido de la fibra del lienzo, nunca en diagonal, para que la adición quede bien inserida y no cree volumen.

Teniendo sujeta la grapa por el otro extremo con el dedo aplicaremos calor con la punta de la plancha o una espátula caliente y la sellaremos inmovilizando el desperfecto del tejido original.

b) Una vez asentado el roto del delantero de la tela acercando delicadamente las orillas del desgarro lo fijaremos con grapas de papel de seda de 2 cm. de longitud por 1cm. de ancho.Lo haremos inmovilizando las orillas de la raja con alfileres, asegurándonos de que estos no perforen la película pictórica, para lo que los situaremos en el mismo borde de la tela desgarrada dejando entre unos y otros espacio suficiente donde aplicar las grapas de papel de seda.Para ello encolaremos la superficie exacta de la tela que irá cubierta por la grapa, así como uno de los lados de la misma grapa de papel sin dejar pestañas limpias de adhesivo que puedan producir desprendimientos de materia pictórica con las rozaduras de las intervenciones posteriores.

INJERTOS

Si el soporte nos llegase incompleto y en presencia de agujeros de dimensiones superiores a 3mm. Procederíamos a realizar un injerto que restituyese la sección ausente.
El injerto se realiza con tejido de lino ligeramente mas fino del original que antes de uso será sometido a un proceso de envejecimiento y debilitamiento, en modo de volverlo imperceptible en su integración al soporte original.Esto se llevaría a cabo en el siguiente modo:

Empezamos por hervir el tejido en agua ,mojándolo tres veces y dejándolo secar entre un baño y otro. Lo planchamos y le aplicamos una mano de cola compuesta de 100gr de cola animal disuelta en un litro de agua y una cucharada rasa de melaza. Una vez seca se lija bién para romper la fibra y que la tela adquiera una consistencia endeble.
Metemos el injerto debajo del soporte para que lo veamos através del agujero que queremos completar haciendo coincidir la dirección de urdimbre y trama de ambos tejidos. Con un lapiz fino marcaremos el perímetro del agujero sobre el tejido que una vez retirado procederemos a recortar por la linea señalada poniendo mucha atención en que el recorte pierda un milímetro de superficie a lo largo de todo el borde que servirá a dar respiro al añadido, en modo que cualquier movimiento de la tela en sucesivas fases de tratamiento de la superficie no haga superponerse y deformar el injerto en contacto con la tela original.

PARCHES

Los parches se confeccionan usando un cuadrado de gasa natural o sintética que recortaremos siguiendo el sentido de las fibras -lo que resulta fácil extrayendo un hilo de la trama textil como hicimos para cortar el tejido de lino nuevo destinado al reentelado.
Las dimensiones del parche excederán en un solo centímetro por cada lado de los puntos más cercanos a los cuatro bordes del agujero que pretendemos reparar. Esta limitación tiene la finalidad de limitar el añadido de materia falsa sobre la obra, que despues viene incrementado por la necesidad de aplicar colas al mismo, de modo que a menor perímetro implicado en el intervento ahorramos un inútil deterioro a zonas que no necesitan de una particular protección. De ese centímetro sacaremos el fleco del tejido a medio centímetro de los cuatro bordes del parche.
El parche puede pegarse al soporte haciendo uso de distintos medios adhesivos.La Bevafilm industrial contine una ligera lámina de resina entre dos estratos protectivos que usando una espátula caliente o plancha se transfiere sobre la tela que deseamos encolar. Debido al costo ingente de este producto tenemos una alternativa de producción artesanal para la que debemos dotarnos de beva, tolueno y papel siliconado que siendo igualmente costoso podremos sustituir por papel de etiquetas.La beva viene calentada al baño maría volviéndose trasparente cuando alcanza el punto de fusión, y a continuación le añadiremos un 20% de tolueno.Damos una mano del compuesto sobre papel siliconado con una brocha y lo dejamos secar de modo que tras la evaporación quede solo la resina sobre la superficie del papel.
Una vez listo el adhesivo lo aplicaremos sobre el soporte y a tal fin usaremos en primer lugar el parche como plantilla para recortar la medida exacta del papel siliconado de que haremos uso. A continuación depositamos el trozo de papel siliconado sobre el cuadro con la cara impregnada en resina hacia abajo, y en la exacta posición que ocupará el parche. Lo planchamos por detrás consiguiendo así que adhiera la resina al lienzo por efecto del calor aplicado.Retiraremos a continuación el papel protectivo,que impide que la resina impregne la fuente de calor, sujetándolo por una esquina y arrastrándolo paralelamente a la superficie. Entonces colocaremos el parche de gasa sobre la superficie impregnada en resina y lo recubriremos de nuevo con el papel siliconado limpio para evitar que el adhesivo traspasando el tejido adhiera a la base de la plancha.
Retiramos el papel siliconado y cubrimos la superficie con papel melines de protección y pesos finalizados a prensar la superficie evitando que los vapores producidos por el disolvente puedan deformar el tejido original.El uso de pesos en esta fase del proceso es fundamental ya que podría producir daños irreparables en la obra cuya restauración nos ha sido encomendada.