Ahora.
Ahora que eso que rige el destino me pide que me siente, que reflexione y respire hondo. Ahora que me pide que piense las cosas dos veces y decida con sabiduría.
Ahora.
Ahora es cuando me voy a liar a patadas con la vida y saltarle los dientes hasta que la lengua le sepa a tacón.
Hasta que sangre.
Ahora.
Abrazos per tutti!
Perdón por ser tan plasta, ya sé que no acostumbro a postear dos veces en menos de una hora, pero es que me he heco un test de esos de liquid generation y me ha salido esto:
y es que me se han saltado las lágrimas. Tengo la peli, el poster, la camiseta y una pegatina en el parche de alante en el bombo... como para no.
Abrazos per tutti!
Es que es lo que tiene ese pueblo, que uno no puede remediar el pensar que todo lo que les rodea es mágico o tiene algo de ello. Yo iba a postear sobre un sueño que he tenido con Diego "el Cigala", en el que nos hemos cantado juntos unas alegrías que me encantan ("El puñal dorado", muy recomendable la versión de Carmen Linares), pero es que os tengo que contar toda la historia del iPod, porque es para flipar. Ahí va:
Salía yo hace 11 días de la biblioteca de La Latina (me gusta La Latina y me gustan las bibliotecas... ¿alguna combinación mejor?) y me dirigía andando a la estación de cercanías de Pirámides. En el camino hay una panadería que regenta un chino bastante mayor, que de hecho se parece al tipo que acaba vendiéndole el Mogwai de turno al padre de Billy, y me llamó la atención un cartel de helados Nestlé que anunciaba que por un helado y un sms te podía tocar un iPod. La verdade es que no soy muy caprichoso, pero estaba como loco por pillar un iPod desde que salió. Como no tengo un duro tenía que hacer como todo hijo de vecino y babear delante de las fotos o disfrutar de su tacto en el Media Markt. En fin, que me dió un no sé qué y entré en la tienda. El chino estaba en la puerta mirándome con esa cara que te miran los chinos de mi-cultura-es-milenaria-y-tiene-unos-valores-que-dejan-a-los-tuyos-por-los-suelos y yo supe (no sé por qué, lo supe) que ese iPod me iba a tocar. Pedí un MAXIBON de nata y caramelo. El chino me dió uno de cookie y yo le dije que no, que quería uno de nata y caramelo. El tipo me miró tal que Yoda (en serio, yo no soy friki) y me dijo que eran 1,30€. Le di el dinero exacto y me fui. Estuve un ratillo viendo a ver como se mandaba el sms y a dónde, y lo hice.
Al cabo de unos días me llaman y me dicen que me ha tocado y yo que no me lo creo. En fin, me lo mandan y hace un par de días que ya lo disfruto (y mucho, no os podéis imaginar que pasote de cacharro).
Hoy he tenido que venir a La Latina otra vez y he querido pasar por la tienda del chino (perdón si alguien se ofende porque le llame chino, pero es que no sé cómo se llama el tipo en cuestión) y me encuentro que está cerrada con un cartel que reza "CERRADO POR DEFUNCIÓN". Y a mí esto me da que pensar. Sí, ya sé que sabéis que soy uno de esos que ven numeritos y nubes azules con los discos de TOOL, pero parece como si el tipo supiera que iba a morir y quisiera hacer feliz a alguien como última obra en la vida. No sé, como si hubiera puesto todo su chi en ello... Ni idea. Conozco bastante bien a los chinos por religión en común, algunos años de Kung-Fu y admiración por sus métodos médicos , y es por esto que todo lo que ha pasado me huele muy raro.
En fin, que piensen ustedes lo que quieran, pero yo estoy que lo flipo.
Abrazos per tutti!
P.D.: Escuchando "Atherwellen", de Kraftwerk. Gracias Apple, gracias Nestlé.
Y esto ya lo cantaba Shakira mientras contorneaba sus caderas de esa forma que tiene ella de hacerlo, así, como si no fuera humana y el grado rotacional de sus nalgas fuera igual al de las rodillas de Jay Kay...
En fin, que he nacido con una flor en el culo. Aparte de la sensación que produce postear desde casa con mi nueva y flamante maquina de matar Teddies Bautistas, me ha tocado un iPod. Si, señores. El único helado que me tomo en todo el verano y me toca un iPod. Delicioso MAXIBON de nata y caramelo con un código de barras bendito, un sms que me cuesta 35 céntimos + IVA y a la semana... un iPod. Y el gordo (no el gordísimo, pero el gordo), de 20 Gb. Cómo mola.
En fin, que sigo escribiendo el cuento (y ahora otro, que son muchos dineros) y no tengo demasiada inspiración para contarles esta historia como debiera, pues contiene muchos alicientes místico-chinescos, pero quería restregarles por la cara que tengo un iPod y by the face.
Hala,
Abrazos per tutti!
Y ese es el mensaje que quiero transmitir a todo aquel que entoavía se digne a leer esto.
Me fascina como hay gente que me sigue dejando comentarios en el post aquel de TOOL con sus numeritos y su Fibonacci, famoso ahora por el infame Códice (el malo es el de las muletas y el santo grial está en el Louvre, por si alguien no lo ha leído, que se joda)
Pero vamos, que a lo que yo iba es a que me perdonéis si no publico en unos días, pero es que estoy un pelín canino y escribiendo un cuento para presentarlo a un concurso que espero ganar, porque ya digo que me hacen falta unas pelillas (unos lauros, vamos). El cuento me está quedando de la hostia (no seguiría escribiéndolo si no) y ya lo postearé cuando lo acabe.
Pues eso, que no me voy y que son sólo causas de force majeur las que me tienen alejado de ustedes.
Abrazos per tutti!
Sí, amigos. El dia ha llegado en el que a mi casa han traido una bestia infame que propagara el dolor en las almas impuras de gentecilla como Miguel Rios o Presuntos Implicados. Gente que, incapaz de ganar dinero como lo hacen los músicos de verdad (esto es, dando giras y no quedándose en casa a criar barriga), recurren a lo poco que les queda de royalties sobre sus discos después de venderse miserablemente al Satanás editorial.
Sí, hermanos, as. Ya tengo ordenador. Tiembla Babilonia, tiembla Teddy Bautista (miserable trompetista) y tiembla industria discográfica... porque tengo ADSL.
Y por supuesto ahora tendré que pasar por el ritual de " Todo el ciber espacio a mis pies, pero... ¿qué coño me bajo lo primero?" Ya he pasado por esto ¡oh, sí! y en una primera experiencia de aquestas, con todo el ciber espacio a mis órdenes lo primero que teclee en buscar del imesh fue We are not gonna take it de Twisted Sister... pero ahora... ahora todo ha cambiado y lo que voy a buscar es...
ANTE TODO MUCHA CALMA de SINIESTRO TOTAL.
Sí señor, así debe ser y así será.
Abrazos per tutti!
Yo soy de esos que piensa que las deficiones son absurdas si uno es incapaz de poner un ejemplo que las ilustre y es por esto que ahí vamos con lo que sigue:
Línea 651 de autobuses, empresa llorente, 21:15 de la noche, de pie porque mi pueblo es así, el autobús hasta arriba pero a nadie se le ocurre poner uno doble de esos que parecen una oruga a esas horas de la noche. Se suben dos mujeres IM-PRE-SIO-NAN-TES. Una morena y una rubia hijas del pueblo de Medellín o algo cerca, pero en Colombia seguro, sólo allí las mujeres rezuman sexo haciéndolo sonar tan lindo. Coquetas como buenas mujeres del Sur, intentan llamar la atención de un apuesto macho nacional que, escondido tras unas gafas de sol (insisto, 21:15), no deja de espiar en el reflejo del cristal cada curva de las que estas mujeres tienen en oferta pública.
El tipo va muy bien vestido (con su D&G y todo eso, bastante indigno para un bus, pero bueno) y tiene pinta de metrosexual, de esos mariconcetes que se dan crema en el contorno de ojos y demás (perdonenme que no entienda este tipo de conportamientos, pero insisto en el hecho de que me afeito cada diez dias y hace sólo unos pocos que empecé a usar espuma).
El caso es que me empieza a extrañar que alguien pueda ser tan descarado a la hora de mirar a una mujer y empiezo a prestarle más atención a él. Estudio el ángulo, el gradaje, las posibles reverberancias de la imagen, los juegos de luces y demás y, cuál es mi asombro cuando después de tanto estudio (y pasarme mi parada) me doy cuenta de que el tipo no está prestándole ninguna atención a ese par de monumentos sino que ha estado dedicando todo su tiempo y esfuerzo a contemplarse en el reflejo del cristal, poniendo caritas y todo eso que hacen algunos cuando pasan por delante de un escaparate o, aún más divertido, cuando esperan a que se abran las puertas del tren sin darse cuenta de que sí, por fuera ese cristal es un espejo, pero por dentro hay un señor bajito con barba de diez días que se ríe de la cara de tipo duro con la que te quieres ver más guapo.
Que alguien me explique hacia dónde vamos... porque me da miedo.
Abrazos per tutti!