El blog, se extiende cada vez más. Ya está alcanzando lugares donde nunca se habían visto ejemplares vivos, como la empresa o las peticiones, ejem, de matrimonio. Un estudio realizado por una investigadora en el MIT demuestra que el blog se está convirtiendo en un fenómeno normal, y que sus practicantes empiezan a tener las dificultades normales en quien practica el noble arte de la escritura en público. Problemas de privacidad, legales y de incompatibilidad son los empleos que les dan de comer empiezan a surgir entre los bloggers... lo que prueba su creciente influencia.
Escribe Jose Cervera en El Mundo que, por un lado los blogs son un sistema sencillo (y casi siempre gratuito) de publicación en Internet que impone sus condicionantes tecnológicos. Por el otro son un nuevo género literario que combina la selección de enlaces de la Red con el comentario de esos enlaces, en muchas ocasiones fuertemente editorial y particular. Esta combinación de caracteres es radicalmente nueva, original e imposible fuera de Internet, y demuestra que el enlace es la verdadera revolución de la Red. No es de extrañar que se extiendan como mancha de aceite; ?quién no desea tener una voz que se escuche en todo el mundo?

El hecho de que blogs y bloggers casi siempre sean nuevos, al menos en esto de la publicación, no quita que sus problemas sean muy parecidos a los de periodistas y medios de comunicación tradicionales. Según el estudio los bloggers están empezando a descubrir que escribir puede tener un alto precio en amistades rotas, trabajos perdidos o incluso procesos legales incurridos. Más de la mitad de los practicantes del blog se identifican con nombre en sus páginas; más de un 35% se han metido en problemas de algún tipo. Y sin embargo el 75% piensan, equivocadamente, que no se les puede demandar por lo que escriben.

La opinión de los lectores esclaviza a los autores, y los bloggers no son una excepción. Casi el 70% reconocen que los comentarios de los lectores afectan, de alguna manera, a su escritura. Y casi la mitad se extrañan (o extrañarían, si les sucediese) de que alguien en el mundo real afirmase conocer sus blogs.

A la hora de analizar y sobre todo extrapolar estos datos hay que tener cuidado: se refieren a bloggers estadounidenses que han respondido a una encuesta online, y los cálculos se han realizado con no llega a 500 respuestas. Pero la evolución y extensión del mundo blog sugiere que están aquí para quedarse. Estamos.